El descontrol térmico es un fenómeno crítico y a menudo temido que ocurre dentro de las baterías, especialmente en las baterías recargables de iones de litio que se usan ampliamente en diversas aplicaciones, como vehículos eléctricos, sistemas de almacenamiento de energía y dispositivos electrónicos portátiles.
Durante el funcionamiento normal de una batería, se producen una serie de reacciones electroquímicas para convertir la energía química en energía eléctrica o viceversa durante la carga. Sin embargo, en ciertas condiciones anormales, puede producirse una fuga térmica. Cuando una batería sufre un cortocircuito interno, por ejemplo, debido a un defecto de fabricación, un daño físico (como una perforación en la carcasa) o una sobrecarga, el flujo de corriente se descontrola. Esto provoca un aumento en la velocidad de las reacciones electroquímicas dentro de la batería. A medida que estas reacciones se aceleran, se genera más calor.